Elaborado con uvas provenientes de fincas La Marthita y Los Maitenes. El corte que constituye a este vino corresponde a las variedades Cabernet Sauvignon, Merlot y Pinot Noir, con gran predominio de la primera.
UBICACIÓN DEL VIÑEDO – Cruz de Piedra (Alto Valle del Río Mendoza), departamento de Maipú, provincia de Mendoza. – Lunlunta (Alto Valle del Río Mendoza), departamento de Maipú, provincia de Mendoza.
CLIMA | Zona privilegiada que posee un microclima particular de veranos secos, con días cálidos, soleados y noches frescas. De notable amplitud térmica que favorece el desarrollo de las uvas, alcanzando una gran concentración de aromas con óptimo estado sanitario.
SUELO | Franco-arenoso de origen aluvional, poco profundo con presencia de canto rodado fino.
COSECHA | Se realiza en forma manual, seleccionando los mejores racimos, con el fin de contar para su elaboración con las uvas de mayor calidad. El momento de realizar la cosecha depende de la madurez alcanzada por las uvas, proceso seguido con cuidado a fin de lograr el punto óptimo, donde se consigue una máxima expresión aromática.
ELABORACIÓN | Se realiza a través del método clásico, con moderada maceración, en tanques de acero inoxidable con estricto control de la temperatura, no superándose los 25ºC. Concluida la fermentación el vino es sometido a procesos de trasiegos, clarificación, filtración y estabilización final por frío.
AÑEJAMIENTO | Se produce durante 3 años en toneles de roble francés, de 5.000 a 20.000 litros de capacidad, donde el vino evoluciona favorablemente adquiriendo una notable complejidad de sabores y aromas. Luego evoluciona en su botella hasta el momento de ser degustado.
DEGUSTACIÓN | Vino de color rubí intenso brillante con delicados matices caoba. Redondo, armónico y equilibrado. De acuerdo a la preferencia del consumidor, el añejamiento de este vino en su botella puede prolongarse por un período de 10 años o más. Por sus características es un vino ideal para acompañar carnes rojas o de caza, pastas y quesos. Se aconseja consumir a una temperatura de 18 a 20ºC. Para mantener sus atributos intactos, durante la guarda la botella debe permanecer en posición horizontal, de manera que el vino se encuentre en contacto con el corcho, alejado del calor y la luz.